jueves, 1 de noviembre de 2012

Dermatomiositis paraneoplásica: Papel de anti-p155

La descripción de la presencia del anticuerpo anti-p155 en pacientes con dermatomiositis (DM) se remonta a la serie de casos que publicó Targoff et al en 2006. El mismo año, Targoff publicó la identificación del antígeno específico del anti-p155, el TRIM33 o conocido también como TIF1-gamma. El anti-p155 de 140 KDa (de donde proviene el nombre por el que también se le conoce: p155/140) fue posteriormente identificado como un hallazgo específico de DM paraneoplásica por Kaji et al y Chinoy et al en dos publicaciones distintas realizadas en 2007.
En España, el trabajo publicado por Labrador et al en 2010 demostró la asociación de este marcador con la DM asociada a cáncer en una serie de 85 pacientes. 

La DM asociada a cáncer es una entidad que guarda estrecha similitud clínica con la DM primaria. La prevalencia en cuanto a sexo, la edad de aparición y el cuadro clínico son superponibles. En algunas series se ha descrito una mayor velocidad de aparición de síntomas asteniformes y una mayor debilidad muscular.
La principal dificultad para su determinación es la necesidad de pruebas de inmunoprecipitación de células marcadas con radioisótopos. Labrador et al en junio de este año publicó en Ann Rheum Dis un estudio comparando las distintas técnicas de ensayo para la determinación de la presencia del antígeno TIF1gamma (TRIM33) por medio de ELISA e inmunoblot. Para ello enroló a 90 pacientes con diagnósticos conocidos de DM o DM asociada a cáncer. La técnica de referencia fue la inmunoprecipitación de células radiomarcadas HeLa. Sus resultados mostraron una concordancia kappa de 0.91 con el ELISA y de 0.88 con el inmunoblot. Estos hallazgos ponen a estas dos técnicas a la cabeza en la posibilidad de reemplazar la determinación convencional.

En líneas generales ante el diagnóstico de una DM, debe plantearse que pueda ser atribuible a un proceso neoplásico. En las múltiples series de DM asociada a cáncer se ha reportado que la resolución de la neoplasia (quirúrgica o no) coincide con la resolución de la enfermedad muscular inflamatoria. La identificación tan pronto sea posible de una DM paraneoplásica favorece el pronóstico de la DM y naturalmente mejora el pronóstico del cáncer. De lo anteriormente señalado sobre el anti-p155 podríamos concluir que es una prueba que podríamos incluir en el estudio de las DM. Debido a que las determinaciones de este anticuerpo no se hacen de rutina y que el uso de ELISA e inmunoblot no están suficientemente extendidos, su indicación podría establecerse después que un primer estudio de imagen (TC body) ha rechazado la existencia de neoplasias. Ante un TAC body sin patología, la positividad de un anti-p155 sustentaría por ejemplo la realización de un PET-TAC o un TAC AR como alternativas de screening de mayor sensibilidad. En la actualidad no hay estudios que permitan protocolizar esta actitud.

Bibliografía relacionada
  • Rhee RL, Baker J. Anti-p155 autoantibodies as a diagnostic marker for cancer-associated dermatomyositis: comment on the article by Trallero-Araguás et al. Arthritis Rheum. 2012 sep;64(9):3059; author reply 3060.
  • Labrador-Horrillo M, Martínez MA, Selva-O’Callaghan A, Trallero-Araguás E, Balada E, Vilardell-Tarrés M, et al. Anti-TIF1γ antibodies (anti-p155) in adult patients with dermatomyositis: comparison of different diagnostic assays. Ann. Rheum. Dis. 2012 jun;71(6):993–6.
  • Aggarwal R, Oddis CV. Paraneoplastic myalgias and myositis. Rheum. Dis. Clin. North Am. 2011 nov;37(4):607–21.


1 comentario:

  1. Estimados amigos,
    En febrero de este año, los mismos autores del Hospital Vall d'Hebron, publicaron un metaanálisis en Arthritis and rheumatism sobre el anticuerpo anti p155.
    En el se resalta su importancia por su alto valor predictivo negativo (de hasta el 95%)

    - Trallero-Araguás E, Rodrigo-Pendás JÁ, Selva-O'Callaghan A, Martínez-Gómez X, Bosch X, Labrador-Horrillo M, Grau-Junyent JM, Vilardell-Tarrés M. Usefulness of anti-p155 autoantibody for diagnosing cancer-associated dermatomyositis: a systematic review and meta-analysis. Arthritis Rheum. 2012 Feb;64(2):523-32

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